Se despertó y algo faltaba en su cuerpo. Su esposa celosa había cobrado venganza
Esto es mitad karma, mitad celos descontrolados.
Este hombre sufrió la peor pesadilla de su vida: creyó que todo iba bien hasta que su esposa celosa decidió arruinarle su vida por completo. Los mujeriegos suelen salirse con la suya, pero esta mujer se fue a un terrible extremo que hizo que el tipo jamás olvidara lo que había hecho.
Liezel Betitta, de 32 años, tenía serias sospechas de que su marido, Mark, la engañaba con la esposa de uno de sus amigos, y creyó que tenían relaciones en el edificio donde él trabajo en Iloilo, Filipinas.
Después de un tiempo decidió actuar y cuando su esposo se quedó a dormir en la casa de uno de sus amigos después de ir a tomarse unos tragos, la tipa llegó de sorpresa con una tijera y le arrancó su parte más íntima.
El hombre no paraba de sangrar, y sus amigos que estaban presentes lo llevaron al hospital inmediatamente.
A pesar de todo Liezel no está arrepentida en lo absoluto. De hecho, dice que se lo merecía. Hoy se encuentra bajo custodia y están investigando el caso.
“No me arrepiento de haber cortado su p%n%. Es un castigo por ser un mujeriego. Estoy lista para enfrentar las consecuencias de mi acción”, comenta.
“Estoy cansada de que ande siempre detrás de las mujeres. Últimamente consiguió una nueva novia”.
La pareja que solía estar siempre discutiendo, tiene unos gemelos de 11 años y una hija de nueve. El acto de su madre podría traerles graves consecuencias psicológicas a estos pobres niños.
Si bien los cirujanos intentaron unir su p%n% a su cuerpo, no hubo éxito alguno. Dijeron que el nervio mayor había sido cortado severamente, por lo que no había mucho por hacer. Además el tejido de la parte cortada también había muerto.
Mark presentará cargos en contra de su esposa, pero nada le devolverá el órgano que lo hacía sentir un hombre. Adiós s%xo para siempre. Ya no hay nada que hacer.
Este hombre tuvo un terrible sufrimiento y las consecuencias del acto de esta mujer podrían afectar gravemente la vida de su esposo que en algún momento tanto amó.
No es necesario romperse la cabeza por una venganza. Hay que saber afrontar nuestra realidad y decidir si queremos o no cambiarla basándonos en un cambio personal y no determinando el futuro de otro de una manera tan brutal. Después de todo, tarde o temprano el destino siempre se encarga de arreglar las cuentas con quien lo merece. Confiemos en él.
Que barbaridad!
@upsocl
